Adhara nace de, desde, con y para mujeres. Y en su evolución se ha dirigido hacia el femenino (nutrición, escucha, creatividad, ternura…) de todas las personas, hombres y mujeres. Aunque estos grupos son dirigidos exclusivamente a las mujeres.
Todavía nos queda mucho trabajo que hacer para derrocar el constructo social del “ser mujer” que hemos interiorizado por la pertenencia a la sociedad patriarcal. La estructura social del patriarcado promueve una clara diferenciación entre género, la cual a su vez, da lugar a la creación de unas expectativas sociales en cuanto a la forma de comportarse, pensar y sentir como hombres o mujeres. Este hecho coarta nuestra libertad de expresión, ser y estar en el mundo.
Muchas mujeres expresan que han tenido bastantes dificultades con sus cuerpos, su menstruación, su sexualidad, su carrera profesional, etc., por el hecho de ser mujeres y lo que se espera que ocurra por ello.
Realizar un trabajo terapéutico para reconstruir nuestra autoimagen, valores y creencias como mujeres facilitará el deshacer de una forma más eficaz la mentalidad patriarcal. Iniciar un proceso personal de autodescubrimiento facilita el empoderamiento de la mujer, lo que podrá ayudar de una forma relevante al cambio social profundo.